Cold Splendor

Una noche de 1981, Natalie Wood cayó al mar y murió ahogada.

El suceso tenía lugar en un yate atracado en las costas de la isla de Santa Catalina, California.
La investigación policial lo consideró entonces un accidente y cerró el caso.

Treinta años después, el Departamento del Sheriff de Los Angeles asegura que nuevas pistas y ciertos testimonios hacen posible la reapertura de este capítulo de la crónica negra hollywoodiense.
¿Murió Natalie Wood asesinada?

Hablamos de la actriz de "Rebelde Sin Causa", "West Side Story" y "Esplendor en la Hierba", entre otros títulos para el recuerdo.
Rostro deslumbrante, derroche de neurosis y fragilidad, estrella clave de los años cincuenta y sesenta, Natalie Wood fue niña actriz y mujer cotizada de la pantalla.

Talentosa, atribulada, insegura, Natalie había sobrevivido a todo y a sí misma, pero conservaba muchos miedos.

Contaba Elia Kazan sobre la experiencia de dirigirla en "Esplendor en la Hierba".
En un momento climático, el personaje de Natalie Wood corre desesperada a un lago e intenta suicidarse.

Rodar esa secuencia no fue fácil, porque Natalie estaba aterrada en el agua, sufriendo un absoluto pavor a ahogarse.
En la secuencia de la película, se puede rastrear su real cara de horror.

Que una persona muera a causa de su mayor fobia es cruel ironía. Que, además, caiga de un barco llamado "Splendour" es digno de un macabro juego divino.
Y que el gran amor de su vida haya sido el principal sospechoso de su muerte da paso a una historia obsesionante, diseñada para adictos a las leyendas.

Robert Wagner dijo que quiso a Natalie Wood desde el primer momento que la vio en pantalla.

Aseguró que la empezó a amar un día en un barco, cuando ella se dio la vuelta y lo miró, con amor y los ojos iluminados por la luz de una linterna.
Un año después de casarse, ella le escribiría: "Eres mi marido, mi pequeño, mi fuerza, mi debilidad, mi amante, mi vida".

Se casaron dos veces y se hicieron la vida imposible.
Cuando ella murió, no eran tan bellos como cuando se conocieron, ni tampoco disfrutaban de la mejor salud profesional.

En aquel yate "Splendour", vivían y quemaban su segundo matrimonio, jamás exento de tormentas y, según los rumores, condimentado con alcohol y drogas.

La noche de la tragedia, Robert Wagner y Natalie Wood habían protagonizado una violenta discusión.
El motivo de la disputa era Christopher Walken, amigo de Natalie, con quien se encontraba rodando la película "Brainstorm".

Aquel fin de semana, Walken era invitado en el barco, ante los celos de Wagner que fueron in crescendo durante la noche.
"¿Quieres follarte a mi mujer?", le inquirió Robert a Christopher, mientras rompía una botella de vino contra la mesa.

Sólo había cuatro personas a bordo del "Splendour", anclado en el istmo de Catalina: Natalie Wood, Robert Wagner, Christopher Walken y el capitán, Dennis Davern.
Davern ha sido el que ha difundido la creencia de que el culpable fue Robert Wagner.


Se decía arrepentido de no contárselo a la policía en su debido momento y ha ofrecido una nueva y extendida versión de los hechos en sus últimas apariciones mediáticas.

Davern dice que vio a la pareja en cubierta discutiendo. Más tarde, un febril y nervioso Wagner habría ido al encuentro del capitán, para decirle que no encontraba a Natalie.
El capitán asegura que Wagner no quiso ni encender los faros ni pedir ayuda inmediatamente. "Esperaremos a que vuelva", habría dicho el actor.

No es el primero en acusar al marido.
Reportajes y dramatizaciones sobre el caso han insinuado repetidamente que Robert Wagner es el asesino.
Él permanecía callado, alegando discreción. En 2008, publicó sus memorias y defendió la teoría del accidente.

Natalie pudo caer al agua, al intentar abandonar el barco en dirección a la lancha anexa.
Asunto extraño, en cualquier caso, si es cierto que la Wood tenía miedo de ahogarse.

Consta que una testigo declaró en 1981.
Aquella noche, se encontraba en un yate cercano y oyó a una mujer pedir ayuda, mientras otra voz la tranquilizaba, asegurándole que la rescataría enseguida.
Esta testigo informaba hace unos días que recibió una amenaza de muerte, poco tiempo después de su declaración.

No obstante, la investigación terminó en aquel 1981 y todos se vistieron de funeral.

30 años después, se suceden las preguntas y Natalie Wood está de actualidad.
Como en el mejor episodio de "Cold Case", el pasado vuelve a escena y se impone la búsqueda de justicia.

Preguntado al respecto, el portavoz del sheriff aseguraba con rotundidad que Robert Wagner está fuera de sus sospechas.
Pero las cejas siguen levantadas de puro escepticismo.

Bajo una tremenda coincidencia, anoche se emitía un episodio de "NCIS", donde Wagner ha aparecido interpretando al sospechoso de un asesinato.
Otra ironía dentro de una historia demasiado trufada de ellas.

¿Podrá resolverse el misterio? ¿Habrá luz sobre lo sucedido en aquella noche oscura como boca de lobo? ¿Saber que fue un asesinato nos hará dormir más tranquilos?

Como gran cuento triste, necesita despejar su incógnita.

El culpable se buscará el pertinente abogado, mientras el resto de los mortales pensaremos aquello de que Natalie Wood descansa, por fin, en paz.
Esplendorosa, nadando a salvo.